La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, se sumó este lunes 21 de abril a las voces internacionales que lamentan el fallecimiento del Papa Francisco. Durante su conferencia matutina, la mandataria extendió un mensaje de condolencias no solo a la comunidad católica del país, sino a toda la sociedad, subrayando el legado del pontífice como un símbolo universal de justicia y solidaridad.
“Nuestro dolor por la pérdida del papa Francisco, abrazo a todos los católicos de México, y también a quienes no lo son”, manifestó Sheinbaum. «El papa Francisco fue un humanista, un hombre que siempre estuvo al lado de los más desprotegidos, de los pobres. Ayer, aún con su fragilidad, su mensaje fue por la paz. Sin duda, es una pérdida dolorosa”.
En un tono reafirmado por la emoción, la presidenta recordó que, a pesar de la naturaleza laica del Estado mexicano, el Gobierno siempre vio en el Papa un aliado en la defensa de los marginados. “Más allá de la religión, defendimos al papa Francisco por su humanismo y su mirada hacia los más necesitados”, señaló. Asimismo, anunció que el martes se realizará una semblanza oficial del Papa para honrar su pensamiento y legado.
Un pontificado marcado por la inclusión
La muerte del obispo de Roma, cuyo nombre secular era Jorge Mario Bergoglio, ha conmovido al mundo tras semanas de batalla contra una «pulmonía bilateral» compliciada por una infección polimicrobiana. Su última aparición pública fue en la misa de Pascua. A pesar de su evidente debilidad, en esa ocasión reiteró su llamado a la unidad global y a la esperanza.
Nacido en Buenos Aires en 1936, Bergoglio hizo historia en 2013 al convertirse en el primer papa latinoamericano y jesuita. Su papado se caracterizó por un enfoque revolucionario, que abarcó desde críticas al capitalismo desmedido hasta la defensa incansable de migrantes y refugiados. Además, confrontó con firmeza los escándalos de abuso sexual en el clero, implementando reformas sin precedentes para aportar transparencia a la Iglesia.
La noticia de su fallecimiento provocó reacciones inmediatas. Desde Cuba, el presidente Miguel Díaz-Canel expresó su pesar, mientras que el cardenal Kevin Joseph Farrel, camarlengo de la Santa Sede, lo describió como un hombre cuyo “amor universal siempre se inclinó por los pobres y marginados”.
En un mensaje publicado en redes sociales, Sheinbaum resumió el sentir de muchos: “Haberlo conocido fue un gran honor y privilegio. Para los católicos y los que no lo son, esta es una gran pérdida”. La mandataria, quien se reunió con Francisco en al menos dos ocasiones durante su gestión como jefa de gobierno de la Ciudad de México, resaltó la vigencia de sus enseñanzas en un mundo fracturado por conflictos y desigualdades.
Con información de telesurtv.net
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