Toluca, Méx. Durante este año, la fundación «Y los Hombres Qué» ha registrado un notable aumento del 90 por ciento en las solicitudes de apoyo de hombres que han sufrido violencia por parte de sus parejas, predominantemente mujeres.
Según María de Lourdes Domínguez, presidenta de la organización, el cambio generacional y las nuevas formas de percepción han facilitado una mayor visibilidad de estas situaciones. Hoy en día, los hombres se encuentran en un entorno que les ofrece menos críticas y burlas al abordar cuestiones relacionadas con su masculinidad, permitiéndoles hablar sin temor a ser cuestionados.
«No tienes idea de la cantidad de jóvenes que han sido golpeados por sus parejas: chicas de 18, 19, 20 años. . . incluso hemos atendido un caso de un menor de 16 años, cuya novia lo agredía y rasguñaba. Fue solo cuando su madre se dio cuenta que pudieron conversar sobre el problema», compartió.
En cuanto a los casos de hombres que han sido víctimas de violencia, Domínguez mencionó que en 2024 atendieron, en promedio, 10 denuncias de este tipo. Sin embargo, muchos abandonaron el proceso de asesoría técnica debido al miedo a ser señalados o ridiculizados. En contraste, solo en el primer trimestre de este ciclo, ya se han documentado 320 solicitudes relacionadas con violencia física, parental y económica.
Respecto a la violencia física, subrayó que esta puede ser igualmente peligrosa sin importar el género, especialmente en el contexto de relaciones que se han vuelto tristemente reconocidas como «relaciones tóxicas«, donde la agresión es normalizada en nombre del amor.
«Existen temas realmente alarmantes. Esto pone de manifiesto que la violencia es un problema que afecta a las parejas de manera bilateral, tanto de hombres hacia mujeres como de mujeres hacia hombres. No obstante, estamos superados. Actualmente, con el empoderamiento femenino, también se está agrediendo en gran medida a los hombres», afirmó.
Además, resaltó que en los últimos años, debido a cambios en el mercado laboral, muchas mujeres se han transformado en el sostén económico de sus hogares, manteniendo a sus parejas. Este nuevo modelo ha alterado la dinámica tradicional, pero ha dado lugar a formas de violencia similares a las que existían con el «proveedor económico«, que menospreciaba al cónyuge que permanecía en casa.
Por último, Domínguez hizo alusión a casos de violencia parental, donde algunas madres impiden que los padres vean a sus hijos si no cumplen con el pago de la pensión alimenticia. «Hay casos en los que los golpean, les quitan a los niños, no les permiten verlos, y aun cuando sí cumplen con la pensión, les demandan porque quieren más. Es una situación realmente compleja para los hombres en la actualidad», concluyó.
Los casos abordados por la fundación en sus áreas de atención legal, psicológica y física destacan por involucrar a parejas jóvenes que, tras poco tiempo de haber contraído matrimonio, se dan cuenta de que no son compatibles y recurren a la violencia como su forma de comunicarse. Asimismo, se presentan situaciones de matrimonios de larga duración en los que, a pesar de un ambiente tóxico, deciden no separarse basándose en el clásico argumento de «pensar en los niños«.
Con información de eluniversaledomex.com.mx
Obtén información al instante, únete a nuestra comunidad digital
Instagram: @dfmexiconews24