El escuadrón élite de Coahuila creado para combatir a los Zetas, están siendo acusado de traficar armas, drogas y personas, de extorsionar, secuestrar, torturar y asesinar de forma sistemática. En Fiscalía reposan más de 250 expedientes en su contra.
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«Eran malandrillos… lo agarramos… y a ese que le disparamos pues ya, a ese sí lo matamos”, confesó uno de los exintegrantes de la policía; situaciones como ésta es por la que acusan a los policías de élite de Coahuila de ser un cártel.
Roberto, es uno de los exintegrantes de este comando policial, y en entrevista confesó que él y otros agentes mataron a un hombre a sangre fría en un retén en 2014.
El cuerpo del asesinado fue enterrado bajo tierra en una de las zonas donde los Zetas enterraban los cadáveres para que sus matanzas se camuflaran.
Otro de los casos es el de Billy, un joven que desapareció hace 7 años y que su familia ha buscado sin descanso. Osvaldo Martínez, padre del desaparecido relata que lo han secuestrado y torturado agentes de la policía del mencionado grupo.
El paredón de fusilamiento
A las afueras de Piedras Negras se encuentra una hacienda en donde los Zetas-un grupo criminal fundado por exmilitares de élite del ejército mexicano- fusilaban a sus víctimas y las arrojaban a una fosa común ubicada en ese predio.
También el grupo de élite de la policía de Coahuila, creado para combatir al cartel, lo ha usado para deshacerse de los restos de sus víctimas. Esto lo confirman testimonios de expolicías, vecinos de la hacienda y carpetas de investigación de la fiscalía del estado, entre ellas la de Billy. Vecinos fueron testigos de cómo arribaban personas durante la noche para tirar cuerpos a la fosa.
La abogada, Ariana García del Bosque dijo que el caso de Billy es apenas uno de los más de 100 casos que existen por desaparición forzada atribuidas al grupo.
Los casos abiertos en contra de la policía de élite desde el 2014 suman a 256 en donde se les acusa por diversos delitos. De entre los que destacan: amenaza, robo, allanamiento, secuestro, desaparición y homicidio.
El grupo criminal de Los Zetas, el cual era considerado como el cártel más sanguinario de México, fue derrotado por las fuerzas de seguridad del estado; entre ellas, la policía de élite, misma que está integrada por personal del Ejército y la Marina. Anteriormente se hacían llamar, Grupo de Armas y Tácticas Especiales (GATE).
Élite, «el nuevo cártel en Coahuila»
Desde la caída del grupo criminal, nadie controla en esa parte de la frontera informan autoridades. Sin embargo, Sebastián, uno de los entrevistados menciona que el grupo de élite son el nuevo cártel.
“En Coahuila te pueden decir que no hay cartel. En Coahuila esos cabrones (los policías de élite) son el cartel”, dice Sebastián, que cuenta su pasado de cinco años con los GATE como una sucesión de tráfico de armas y drogas, enfrentamientos fingidos, escenas de crimen alteradas y extorsión, secuestro y tortura de los coyotes que cruzan migrantes a Estados Unidos.
Con información de: Faro Informa
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