Tras un mes de su renuncia, el extitular de la Unidad Especial para la Investigación y el Litigio del caso Ayotzinapa (UEILCA) Omar Gómez Trejo, reapareció este jueves en California, Estados Unidos, luego de que hace un mes presentó su renuncia.
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Acompañado de la señora Cristina Bautista, madre de Benjamín Ascencio Bautista, uno de los 43 normalistas desaparecidos en 2014, el ahora exfiscal participó en dos foros con activistas de derechos humanos y promovido por el National Lawyers Guild previo a la Cumbre por la Paz organizada por Global Exchange.
En su primer acto público como exfuncionario federal, Omar Gómez Trejo dio sus primeras impresiones sobre lo que le sucedió a los jóvenes la noche del 26 y madrugada del 27 de septiembre de 2014.
Exfiscal Omar Gómez Trejo
Durante su participación estimó que la desaparición de los estudiantes normalistas fue parte de una forma de control que ejerció el crimen organizado en Guerrero porque Iguala es un centro de distribución de droga gracias a la conexión carretera que hay hasta la frontera con Estados Unidos.
También aseguró que dicha estrategia fue posible debido a la colusión que existió por parte de numerosos elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena). Prueba de ello, dijo, es que de las 83 órdenes de aprehensión que se giraron cuando todavía se encontraba al frente de la UEILCA, al menos 20 eran en contra de militares.
“Al principio pensamos que no íbamos a encontrar nada, me tocó viajar varias veces a Washington y Chicago para platicar directamente con los fiscales y al final sí obtuvimos la evidencia. Cuando yo regreso a México es que nos damos cuenta de la cooptación del Estado mexicano y donde realmente entendemos por qué la desaparición de los estudiantes tenía una fuerte vinculación con el crimen organizado: utilizaron este hecho como una forma de control de la región. Giramos 83 órdenes de aprehensión y entre ellas están al menos 20 miembros del ejército mexicano”, expuso.
Órdenes de aprehensión
Sin embargo, no mencionó que la propia FGR echó atrás 21 de esas órdenes, de las cuales 16 eran contra mandos y personal de tropa de la Sedena. Dicho desechamiento, según el propio presidente Andrés Manuel López Obrador, habría sido una de las razones por las que Gómez Trejo optó por separarse del cargo, a pesar de contar con la confianza de los familiares de los normalistas.
Este respaldo fue reiterado por la señora Cristina Bautista durante el evento en San Francisco, California, donde afirmó que “justo cuando el trabajo de la comisión especial del caso estaba dando resultados, gracias al trabajo del ahora exfiscal, entonces lo corren y lo amenazan con abrirle una investigación”, acción por la que responsabiliza al fiscal general de la República, Alejandro Gertz Manero.
En septiembre pasado, días después de la renuncia del fiscal Omar Gómez Trejo, el Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes advirtió que uno de los riesgos de su salida es que la investigación por el caso Ayotzinapa se podría retrasar de tres a cinco años. Ahora a cargo de la UEILCA se encuentra Rosendo Gómez Piedra, quien sostuvo su primera reunión con los padres el lunes pasado.
Con información de El Sol de México
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